En ésta primera entrada, tengo tantas cosas que decir que no sé ni por donde empezar jaja! Empezaré explicando (resumidamente, sino, nos pueden dar las 22:00 de la noche...) un poquito nuestra historia:
Yo me llamo Elsa, tengo 21 añitos recién cumplidos, mi compañero de viaje desde hace más de 5 años se llama Jon y tiene 23 años, nos conocimos siendo unos crios, ibamos a la misma clase y viviamos casi al lado, siempre jugabamos en el mismo grupitos de niños y desde siempre nos llevabamos súper bién. En 5º de primaria, Jon me escribió una notita que dejó debajo de mi pupitre, preguntándome si quería ser su novia, y las palabras "SI" y "NO", me dijo que hiciese un círculo en la que quisiera jajaja, cosas de niños...Sin dudar, hice un circulo alrededor del SI, y hasta hoy.
Creo que sobra decir que es el hombre de mi vida y de mis sueños, es mi amigo, mi confidente, mi mayor apoyo, mi amante, mi todo. Hace 3 años, decidimos irnos a vivir los dos juntos, teníamos trabajo y estabamos completamente seguros así que...por qué no? El siguiente paso, el más importante de nuestras vidas, lo dimos hace unos 4 meses: buscar un bebé.
Sí, sómos muy jovenes, tenemos toda la vida por delante bla bla bla...pero si tenemos casa, trabajo, estabilidad, qué nos impide buscar un bebé siendo jovenes? Igual dentro de 10 años no tenemos ninguna de esas 3 cosas, y las preocupaciones, miedos e ilusiones que podemos tener siendo padres ahora, las tendremos igual dentro de 10 años.
El caso es, que nos pusimos a la búsqueda, no hubo suerte el primer mes, aunque tampoco estábamos "buscando" exactamente, estabamos "dejandolo suceder..", pero no sucedió. Al mes siguiente decidimos intentarlo de verdad, controlando tiempo de ovulación y todas esas cosas que se suelen hacer para que se inicie el viaje más bonito que pueda existir. Tampoco hubo suerte. He de decir, que fué un palo muy gordo, y ahora, no me quiero ni imaginar como lo deben pasar las parejas que tardan meses e incluso años en conseguirlo.
Dicen que a la tercera va la vencida y así fué, cuando vimos esas 2 rayitas nuestra vida cambió por completo, a mejor, por supuesto. Desde ese segundo, todo giraba entorno a la pequeña cosita que crecia en mi interior. Para no enrrollarme mucho...creo que uno de los momentos más felices y bonitos de mi vida fué el día en que escuchamos el corazoncito del bebé, qué sonido tan lleno de vida, jamás me cansaré de oirlo!!
Éste miercoles, nos hicimos el Detesex, un análisis de sangre para averiguar el sexo del bebé a partir de la semana 8 de gestación. Pues bién, hoy nos dieron los resultados y es....una niña, nuestra pequeña Noa!!
No podríamos ser más felices y afortunados, había oido mil veces eso de que el amor que una madre puede sentir hacia su hijo incluso antes de nacer, es el amor más fuerte del mundo, y ahora veo que es verdad, desde que sé que estoy embarazada, mi mundo gira alrededor de mi chiquitina, y aunque me parezca imposible, cada día la quiero más y más, supongo que es como eso que dicen "te quiero más que ayer pero menos que mañana"!
Y hasta aquí nuestra historia, que espero seguir contando hasta el día en que por fín tengamos con nosotros a Noa, que a pesar de ser todavía muuuy chiquitita y estar en la barriga de mamá, tiene a sus papis completamente enamorados. Mientras tanto...quedan muchas semanas por delante para ir narrando este precioso viaje...
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